En España, muchos autónomos y pequeñas empresas se encuentran en medio de una importante transición hacia la digitalización de sus operaciones. En el año 2023, se implementó una nueva regulación que exige a estos trabajadores y a las pymes la emisión de facturas en formato electrónico. No obstante, gracias a la Ley Crea y Crece, Hacienda ha concedido una prórroga, permitiendo que las facturas digitales no sean obligatorias para los clientes hasta el año 2025.
En este contexto, Sage 50, el software de gestión financiera y contabilidad para empresas y autónomos, se convierte en una solución fundamental para facilitar la transición hacia la facturación electrónica, asegurando el cumplimiento de las regulaciones legales ya que ContaPlus y FacturaPlus no cumplen con estas regulaciones.
Este marco legal es una parte esencial del Plan de Recuperación del Gobierno, diseñado para impulsar a las pymes y mejorar las condiciones empresariales, garantizando igualdad de oportunidades en un mundo cada vez más digitalizado. Esto es especialmente relevante considerando que la mayoría del tejido productivo español está compuesto por autónomos y pequeñas empresas.
Uno de los aspectos clave de esta ley es la emisión de facturas electrónicas. Sin embargo, debido a la falta de aprobación del Real Decreto que establecería las regulaciones específicas, esta obligación podría postergarse hasta mediados de 2025, como se detalla a continuación.
De acuerdo con fuentes del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, bajo la dirección de Nadia Calviño, se ha sometido a consulta pública el proyecto de normativa para regular la facturación electrónica. El problema radica en que dicho proyecto aún no ha avanzado debido a retrasos electorales y no ha llegado al Consejo de Estado.
¿Qué implica esto? Las empresas con una facturación anual superior a ocho millones de euros estarán obligadas a emitir facturas electrónicas a partir de mediados de 2024, mientras que aquellas con ingresos inferiores podrán posponer esta obligación por dos años.
El objetivo es que la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) desarrolle una herramienta o plataforma que permita a los autónomos cumplir con la emisión de facturas digitales sin costo adicional, evitando así gastos en profesionales informáticos.
Sin embargo, esta medida no solo busca simplificar la vida de los autónomos, sino también combatir el fraude fiscal, como exige la Ley 11/2021, de 9 de julio, de medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal. Entre sus disposiciones se encuentra la obligación para las empresas con una facturación inferior a seis millones de euros de comunicar de inmediato a Hacienda todos sus registros de facturación.
El propósito de esta regulación es unificar las obligaciones de emisión de facturas y la lucha contra la evasión fiscal en un único decreto-ley, permitiendo un control en tiempo real.
Por lo tanto, se recomienda a los autónomos y pequeños empresarios adoptar este modelo lo antes posible, lo que implica la utilización de un software de facturación que combine ambas soluciones para cumplir con la normativa vigente. Sage 50 es una excelente opción en este sentido, ya que ofrece herramientas robustas para la gestión de facturación electrónica, cumpliendo con los requisitos legales y facilitando la transición hacia un entorno empresarial más digitalizado.